Las desventajas de ser un todólogo

Me he dado cuenta que durante toda mi vida he andado por el camino de la todología. Fui a clases de todos los deportes habidos y por haber, cada etapa de mi vida me interesaban cosas completamente diferentes y por si fuera poco, estudié administración.

En este mundo que te exige una especialización cada vez más intensa, se me hace más difícil encontrar un lugar para mí; parece que he ido en contracorriente, un vil salmón.

Hay tantas cosas en este mundo que me gustan, que siento muy difícil solo enfocarme a una, o a un espectro muy pequeño.

Que puedes hacer en esta época si quieres ser (o eres un poco):  diseñador, ingeniero, escritor, músico, bicicletero, emprendedor, astrónomo, persona espiritual, viajero, historiador, filosofo, político, chef y la lista continua haciéndose cada vez más larga; es difícil encontrar algo que absorba todo eso, más bien no existe.

Que fácil sería para mí, hacer algo en específico, ya tienes una línea trazada, solo tienes que seguir el camino para llegar al “éxito”, más bien a la meta. Pero qué pasa si para lo que quieres no solo no hay una línea trazada, sino que esa línea inexistente va en su mayoría de las veces en un sentido opuesto a todas las líneas definidamente trazadas.

Cada persona va haciendo su camino, y estoy encontrando que muy pocas caminan por el mío. Aunque les confieso que se ve bastante interesante, intrigante y divertido; llegar a áreas inexploradas, descubrir nuevos gustos, o por el otro lado empezar a desechar unos.